Vivimos en la era digital. En la de la tecnología que avanza a un ritmo de vértigo.
En otras palabras, una nueva revolución industrial.
Y como en las que ya hemos vivido a lo largo de la historia, muchas personas se acercan a esta con miedo.
Tener la sensación de que una nueva tecnología nos reemplazará no es fácil de gestionar. Lo que mucha gente no quiere ver, es que por mucho avance tecnológico que haya, el capital humano siempre tiene que estar ahí.
El capital humano es el conjunto de conocimientos, habilidades y actitudes de los trabajadores que la empresa dispone para lograr sus objetivos empresariales. En otras palabras, es el capital intelectual que el empresario, a través de una buena gestión del talento, puede transformar en rendimiento operativo.
A pesar de lo ya mencionado con ese miedo a que la tecnología se adueñe de muchos puestos de trabajo, la realidad es que no existe ninguna empresa que funciona o ha funcionado sin, al menos, una persona.
Pueden cambiar las necesidades, pero el factor del capital humano sigue allí.
Las personas son el eje y el corazón del funcionamiento de todas ellas. Y por mucho avance que haya, esto no va a poder cambiar.
Cuando tenemos una empresa en nuestras manos, sin importar cuál sea la actividad, debemos ser conscientes de que se necesitan tres tipos de recursos: los económicos, los tecnológicos y los humanos. Y, para que exista una armonía, se deben equilibrar y gestionar con sabiduría. Solo así se puede funcionar con éxito.
En el caso de que uno de los tres falle, será como un trípode que cojea.
Sin el factor económico, la empresa cae, si el factor tecnológico no funciona hoy en día, se tuerce la empresa… y sin, al menos, un humano, no se puede gestionar de ninguna manera.
Además, tratar de competir en productos, servicios y precios hoy en día es prácticamente imposible. Ya ni hablemos del gran avance tecnológico.
Por ello, la diferenciación que ayuda a marcar la diferencia entre tu empresa y la de la competencia, se encuentra en los individuos.
Por suerte, para nosotros, no hay dos personas iguales y podemos aprovecharlo a nuestro favor.
Si estás preguntándote como se hace eso de gestionar al capital humano, es importante analizar qué hacen las grandes empresas para conseguirlo.
En este tipo de análisis, se destacan tres puntos imprescindibles.
Vamos a verlas una a una.
La selección de los recursos humanos es primordial.
En este aspecto, se deben analizar a los candidatos que se presentan al puesto a cubrir.
Para ello, se debe averiguar las competencias profesionales, cuáles son sus valores y en qué medida se identifican con los de nuestra empresa.
¿Qué motivaciones tienen? ¿Cuál es su grado de implicación con el puesto? ¿Encaja con la filosofía y forma de trabajar de nuestra empresa? Estas son solo algunas de las preguntas que deberían hacerse.
Al contrario de lo que mucha gente piensa, la capacidad y creatividad necesita del estímulo constante.
La formación es una manera de motivar para no caer en rutinas productivas.
Al final, formar al equipo humano también es apostar por tener una mayor competencia y aumentar el rendimiento y productividad.
Este tipo de planes nos ayudan a ser más competitivos, ya que nos permiten hacer frente a nuevas situaciones.
Mediante las evaluaciones del desempeño, le desarrollo del liderazgo y el diseño de itinerarios formativos, se pueden establecer planes de carrera para alcanzar nuevas competencias profesionales y aumentar el sentimiento de pertenencia a nuestra empresa.
Para la dirección de cualquier empresa, es imprescindible asegurarse de contar con un equipo humano que cuente con las mejores habilidades, conocimientos y actitudes para tener un equipo motivado y feliz.
Por lo tanto, la inversión en nuestro capital humano debe formar parte de uno de los activos más valiosos para tu organización.
¿Por qué? Por el simple hecho de que está ligado directamente con la obtención de nuevos recursos tecnológicos y económicos.
Además de las ya mencionadas formaciones, invertir en actividades de team building es una gran decisión.
Ya que el Team Building engloba una gran variedad de actividades que se han orientado y estructurado para mejorar el rendimiento y la motivación de los trabajadores de tu empresa.
En Human Towers somos expertos en desarrollar las habilidades de liderazgo y team building a partir de la filosofía del Casteller y toda la relación que tiene con el mundo de la empresa. Si estás interesado en invertir en tu capital humano para trasladar una filosofía que premia el trabajo en equipo, la comunicación y la colaboración, envíanos un mensaje y nos pondremos en contacto contigo para empezar a crear ese equipo de la que te sentirás orgulloso.